Toyota Motor, el fabricante de vehículos más grande de Japón, anunció hoy que espera cerrar el actual año fiscal con multimillonarias pérdidas por primera vez desde 1940 debido a la caída mundial de ventas y la mayor apreciación del yen.
La compañía precisó en un comunicado que las pérdidas por operaciones en el presente año fiscal, que termina en marzo próximo, será de 150 mil millones de yenes (casi mil 700 millones de dólares), según la agencia de noticias Kyodo.
Estas cifras suponen un revés muy importante en comparación con los del año fiscal anterior, cuando tuvo una ganancia operativa récord de 2.27 billones de yenes (25 mil 235 millones de dólares).
"Enfrentamos circunstancias de emergencia sin precedentes", dijo el presidente de Toyota Motor, Katsuaki Watanabe, en una rueda de prensa en Nagoya, prefectura japonesa de Aichi.
Para combatir condiciones de negocios que empeoran rápidamente, señaló Watanabe, Toyota pospondrá o revisará casi todos los proyectos dirigidos a expandir la producción, capacidad o construcción de nuevas plantas alrededor del mundo.
Toyota tiene planes de congelar el lanzamiento de una nueva fábrica en el estado de Mississippi de Estados Unidos y reducir la producción en India, dijo.
Pese a las pérdidas en la actividad de venta de vehículos de la compañía, Toyota espera para el año fiscal en curso una ganancia neta de 50 mil millones de yenes (555 millones de euros).
Respecto al volumen de ventas globales, Toyota también redujo sus objetivos para el año fiscal 2008 en 540 mil unidades en relación al cálculo anterior en julio de 8.96 millones de unidades, incluyendo las ventas de sus dos subsidiarias - Daihatsu Motor e Hino Motors Ltd.
Watanabe dijo que la demanda de automóviles se redujo no sólo en Estados unidos, Europa y Japón, sino también en los mercados emergentes que habían sido robustos en medio de crecientes preocupaciones económicas.
"No se puede ver dónde queda el fondo", dijo al referirse a las decrecientes ventas de vehículos.
En otro doloroso golpe, la fuerte apreciación del yen frente al dólar estadunidense y el euro redujo las ganancias del fabricante de autos e hizo que la firma redujera sus proyecciones de ganancias para el año fiscal 2008 nuevamente.
La pérdida operativa de Toyota será la primera desde que el fabricante de autos empezó a publicar resultados de ganancias en 1940
En 2008, el fabricante japonés de vehículos, con sede en Toyota, prefectura de Aichi, también redujo sus objetivos de producción anual a 9.23 millones de unidades, de un objetivo anterior de 9.5 millones de unidades.
La crisis financiera global ha obligado a los fabricantes japoneses de automóviles a reducir sus pronósticos de ganancias, a bajar su producción, a cortar empleos y a implementar otros planes de reestructuración.
El mes pasado, Honda Motor, el segundo más grande fabricante de autos en Japón, anunció su tercera reducción a sus pronósticos para el año fiscal 2009, así como sus planes de retirarse de las operaciones deportivas de Fórmula Uno.
El tercer fabricante de vehículos más grande de Japón, Nissan Motor, también anunció la semana pasada que recortará aún más la producción de autos y que reducirá el número de empleados temporales en marzo próximo para combatir la contracción global de ventas de autos.
Además de las compañías japonesas, otros fabricantes de automóviles de todo el mundo han visto pérdidas debido a la caída de ventas a causa de la crisis financiera mundial, la crisis de crédito y la falta de confianza entre los consumidores.
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