viernes, 16 de noviembre de 2007

El divorcio exprés fulmina a 90.000 parejas

Las rupturas matrimoniales definitivas aumentan un 74 por ciento en 2006, mientras las separaciones bajan en un 70 - Tres de cada cuatro demandas se resuelven en menos de seis meses

Madrid- Cada vez más parejas deciden romper su relación. La cifra de nulidades matrimoniales, separaciones y divorcios aumentó de nuevo en 2006, en concreto, un 6,5 por ciento. El dato, que confirma la tendencia de los últimos años, no es, sin embargo, lo más llamativo en el análisis de las rupturas: al contrario de lo que ocurría hasta 2005, la mayoría de las parejas optan por el divorcio, un punto y final a su relación, en lugar del punto y aparte de la separación. De este modo, el número de parejas divorciadas ha aumentado un 74,3 por ciento en sólo un año, mientras que las demandas de separación han caído un 70 por ciento.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) hizo públicos ayer estos datos, recopilados a partir de información de los Juzgados de Primera Instancia, Primera Instancia e Instrucción y de Violencia sobre la Mujer. Unas cifras llamativas que confirman un cambio de mentalidad y que, según reconoce el propio INE, «se explica en gran medida por el cambio de marco regulatorio por la entrada en vigor de la Ley 15/2005 de 18 de julio, que permite el divorcio sin necesidad de separación previa». Este marco legal al que alude el instituto se centra en el llamado «divorcio exprés».
En menos de seis meses
Se trata de una figura jurídica que el año pasado hizo honor a su nombre: de las 145.919 rupturas matrimoniales registradas, 126.952 fueron divorcios. En este grupo, un 72 por ciento de las demandas -alrededor de 90.000- se resuelve en menos de seis meses. En el caso de las separaciones, la mayoría (el 57,2 por ciento) también se resuelve en menos de seis meses, y sólo un 12,5 por ciento tarda más de un año. Las altas cifras de rupturas se acercan ya al número de bodas anuales: 211.818.
Los trámites se han agilizado, y eso también ha repercutido en el número de matrimonios que se separa antes de cumplir un año de casados. En esta categoría se registró el «excepcional aumento» de un 330,6 por ciento -1.055 parejas en 2006- respecto al año anterior.
Sin embargo, la media de convivencia de las parejas que rompieron el año pasado es mayor. Nueve años para los que reciben la nulidad matrimonial, 17,4 para los que se separan y 14,7 años para los casos resueltos por divorcio. La mayor parte de los matrimonios se disuelve cuando los cónyuges tienen entre 40 y 49 años. En el caso de las mujeres, la edad media en la que se separan de su pareja es de 40,5 años. Los hombres toman la decisión algo más tarde, a los 43,2 años.
Cuando un matrimonio se disuelve, la mayoría de las veces se hace «de mutuo acuerdo» o por consenso. Sin embargo, hasta un 48 por ciento de las separaciones y un 34,7 por ciento de los divorcios se resuelve de forma contenciosa.
De acuerdo o no, en la mayoría de los casos, cuando una pareja se separa, hay hijos de por medio y, casi siempre, menores de edad. En estos casos, la obligación de pagar una pensión alimenticia corresponde, casi siempre, a los padres (un 78,7 por ciento de los casos).
Las islas, a la cabeza
La tasa de disoluciones matrimoniales por cada millar de habitantes en España es de 3,6. Pero esta cifra presenta notables variaciones entre las distintas comunidades autónomas. Lo primero que llama la atención, a la vista de los datos, es que los dos archipiélagos están a la cabeza de España en rupturas. Canarias, con 4,32 por cada 1.000 habitantes, y Baleares, con 3,94, encabezan el ranking de separaciones y divorcios. Les sigue Cataluña, con una tasa de 3,85. Las ciudades de Ceuta y Melilla también presentan altas tasas de ruptura matrimonial.
En el otro extremo de la balanza se sitúan las autonomías más rurales. Extremadura, con 2,23 disoluciones por cada millar de personas, Castilla y León, con 2,30, y Castilla-La Mancha, con 2,39, ocupan los últimos puestos de la lista.
La estadística de rupturas desató ayer todo tipo de reacciones. El director del secretariado de la Subcomisión Episcopal para la Familia, el padre Leopoldo Vives, afirmó ayer que, con el divorcio exprés «cuesta menos divorciarse que darse de baja de una compañía telefónica».
Para la Federación de Mujeres Separadas, en cambio, el «boom» de esta fórmula legal demuestra la «inteligencia» de quienes están inmersos en un proceso de ruptura.

Fuente: www.larazon.es